Cuevas de Artà
Historia
Más sobre la historia de las Cuevas de Artà
El primer plano detallado de la caverna lo elaboró Pere d’Alcantará Peña en 1862, apareciendo publicado numerosas veces durante los decenios siguientes, entre otras, en la monumental obra de Sebastián Gay y Baltasar Champsaur (1885) titulada "Album de las Cuevas de Artá y Manacor".
Durante la segunda mitad del siglo XIX, la cueva alcanzó un notable prestigio a nivel europeo, gracias a las visitas y descripciones de personajes diversos: los científicos alemanes H.A. Pagenstecher y R.W. Bunsen (1865), el Archiduque Luis Salvador de Austria (1884), o los viajeros y exploradores franceses Gastón Vuillier (1888) y Edouard-Alfred Martel (1896).
La gran escalinata de acceso fue construida en 1860 con ocasión del viaje a Mallorca de la reina española Isabel II, aunque no llegó a visitar la cueva. El rey Alfonso XIII visitó las Cuevas de Artá en 1904.
A partir de la década de los años 1960, las Cuevas de Artá se incorpora al fenómeno del turismo que se produce en Mallorca, contribuyendo decisivamente a la oferta turística basada en el medio natural de la isla.
Teniendo en cuenta las grandes dimensiones de la entrada natural de la cueva, visible desde muchos puntos de las cercanías, algunos autores han situado en las Cuevas de Artá leyendas relacionadas con su utilización como refugio por la población musulmana tras la conquista cristiana de 1229.
Otras leyendas sitúan en la cueva la existencia de ermitaños que serían responsables del nombre histórico de la cavidad, que era conocida antiguamente como ¨Cueva de la Ermita¨, o incluso como ¨Coves de s’Ermità¨.
Con posterioridad dicho nombre irá cayendo en el olvido en favor del nombre de la Villa en cuyas cercanías se localiza la cueva. No obstante, y a pesar de la denominación que ha prevalecido, las Cuevas de Artá se ubican actualmente en el término municipal de Capdepera.
A parte del interés científico de la cueva, su majestuosidad y valores estéticos cautivaron desde siempre a artistas y literatos. Cabe destacar el poema del escritor mallorquín Miquel Costa i Llobera, quien sitúa en esta cueva la leyenda de la sacerdotisa Nuredduna en su obra ¨ La deixa del geni grec¨ (1900). Esta leyenda nos habla de los intercambios culturales en el Mediterráneo durante la antigüedad clásica. Sus inspirados versos resaltan el carácter de intemporalidad de este excepcional fenómeno geológico que son las Cuevas de Artà.
"Per un batec de l’ansia amb què ton cor expira daríem les centúries de calma que tenim" .
"Por un látido del ansia con que tu corazón expira daríamos los siglos de calma que tenemos".
La deixa del geni grec (1900)
Leer artículo
video
cuevas de arta